martes, 30 de julio de 2013

Conoce las mejores opciones de alojamiento para la gente mayor

A medida que nos vamos haciendo mayores, vamos necesitando servicios y cuidados que nos hagan la vida más cómoda y sencilla. Poco a poco vamos perdiendo autonomía y por eso hay que conocer las diferentes opciones de alojamiento para mayores y las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas.

La opción más demandada en la actualidad son las llamadas viviendas para mayores o casas tuteladas. Se trata de edificios de viviendas totalmente independientes, pero con espacios comunes en los que hacer vida con el resto de vecinos; y con diferentes servicios de limpieza, seguridad, comida o mantenimiento.
La ventaja principal de estas viviendas es que sus habitantes mantienen totalmente su autonomía e independencia, y pueden hacer una vida totalmente normal sin tener que preocuparse por limpiar el hogar o arreglar un enchufe por ejemplo, ya que estos servicios son comunes para todos los vecinos. Esta es la opción más cercana al modo habitual de vida, garantizando la independencia y la privacidad de sus habitantes.
 
Otra opción son las residencias de ancianos. Esta es la más tradicional ya que es una opción de alojamiento con años de trayectoria. En las residencias encontramos personas mayores dependientes con necesidades de todo tipo que requieren cuidados constantes. 

En una residencia, además de alojamiento, también se proporciona atención total según las necesidades de cada persona, a los mayores que ya no pueden permitirse vivir solos.

La tercera opción a las que podemos optar es un centro polivalente de recursos que ofrecen una variada gama de prestaciones y servicios como el alojamiento, apoyos en el domicilio, formación, servicio de centro de día u otros en función de las necesidades de las personas mayores y de sus familias.

En estos centros se proporciona de forma flexible el conjunto de cuidados y recursos que las personas mayores necesitan, y también se proporciona apoyo a sus familiares. Se dirige tanto a personas dependientes como no dependientes y garantiza la continuidad de sus cuidados evitando desarraigos y otras molestias.